Ronaldo está triste. O lo que es lo mismo, la estrella del fútbol, que parece tenerlo todo, no es feliz. Pero ¿qué es la felicidad? Un estado de ánimo, una utopía, una necesidad, un mito, una meta... Para el filósofo Javier Sádaba, la felicidad "es un estado de ánimo total, de cuerpo y alma. Podría mitificarse -añade-, pero no es un mito, es constitutiva de nuestro modo de ser. ¿Una utopía? "Sí; si por utopía se entiende un ideal para alcanzar, entonces sin duda es utópica", concluye el catedrático de Ética y Filosofía de la Religión por la Universidad Autónoma de Madrid.
Para Vicente Simón, psiquiatra experto en la conducta y profesor de Psicología Fisiológica en la Universidad de Valencia, la felicidad "es un estado mental al que todos aspiramos y con el que, en cierta manera, nos sentimos comprometidos. Sentimos el deseo y casi la obligación de alcanzarlo". Laura Rojas-Marcos, licenciada en Psicología por la Universidad de Nueva York y máster en Psicología por la Universidad Albert Einstein de Yeshiva, define, por su parte, la felicidad "como un estado emocional de bienestar y satisfacción con la vida en general. Si uno es feliz está contento, es optimista y se siente tranquilo. Enfoca su energía en los aspectos positivos de su vida".
Albert Figueras, médico y profesor de la Universitat Autònoma de Barcelona, afirma que existen tantas "concepciones de la palabra felicidad como personas hay en la Tierra. Y todos somos -añade- felices varias veces al día". Ese momento de "bienestar mental", en el que se segregan neurotransmisores y hormonas, "es muy beneficioso para nuestra salud", afirma Figueras, que trabaja también en la Fundació del Institut Català de Farmacologia y dedica buena parte de su tiempo a la promoción del uso racional de medicamentos.
Sádaba, Rojas-Marcos, Figueras y Simón son ponentes del encuentro La influencia de la felicidad en el estado de la salud, que arranca mañana en el Palacio de la Magdalena de Santander, organizado por el Instituto Coca-Cola de la Felicidad. Javier Urra, psicólogo forense, profesor de Ética en la Universidad Complutense de Madrid y secretario de ese encuentro, define la felicidad como "una actitud, una ilusión y una meta vital, con un deseo de compartir".
¿Se puede ser feliz en un momento tan difícil como el actual? Urra lo tiene claro: "Este es un buen momento para huir del pesimismo, para dar esquinazo a los agoreros, para desde la realidad dar impulso, esperanza, mostrar nuestros límites y generar una cadena de compromisos". Javier Sádaba parte de la premisa de que "en tiempos de crisis lo que se intenta es sobrevivir. Nadie desea estas situaciones, como tampoco se busca el dolor". Pero una vez sobrevenido el agobio por los apuros económicos, se abre "la oportunidad para que aparezca el lado más humano del Homo sapiens". Y lo más "sensato", para este filósofo, es "aprovecharlo". Vicente Simón considera que hay cosas (accidentes, separaciones de los seres queridos, la muerte) mucho peores que la crisis y por ello estima que este momento de vacas flacas "es una oportunidad para superarse". Y afirma que se puede ser feliz también en tiempo de crisis. "La felicidad no depende tanto de las circunstancias externas como de nuestra actitud interna ante ellas".
Albert Figueras coincide con sus colegas y recomienda aplicar, en este delicado momento, "la filosofía ubuntu propia de los pueblos africanos". En época de crisis "nos hacemos humanos a través de los demás y el bienestar llega cuando nos sentimos parte del grupo, ayudamos a construir y tiramos del carro. La crisis abre oportunidades y nos permite volver a lo auténtico, a lo no ostentoso, a lo pequeño. Y eso puede hacernos felices".
Para Laura Rojas-Marcos, la clave para ser feliz en tiempo de crisis "es afrontar ese momento como un reto o una oportunidad". Mitigar el estrés, la incertidumbre o las preocupaciones dedicando un tiempo a actos solidarios "puede ayudar a alcanzar un sentimiento de felicidad". Aunque eso -añade Rojas-Marcos- no anula las preocupaciones. La receta de esta psicóloga es "tener un plan de acción y ser resolutivos".