Yeonmi Park
Yeonmi Park creció pensando que era normal ver cuerpos sin vida en su camino a la escuela; tener tanta hambre que comía plantas silvestres; y que los vecinos desaparecieran sin previo aviso. Creía que el «Querido Líder» podía leer sus pensamientos y castigarla en consecuencia.
A los trece, cuando la hambruna y el encarcelamiento de su padre volvieron su situación inaguantable, Yeonmi Park y su familia tomaron la arriesgada decisión de escapar de Corea del Norte, y cruzaron las aguas congeladas del río Yalu con destino a China, para terminar en manos de traficantes de personas.
Tras casi dos años a merced de sus captores chinos y de vivir en un mundo incluso más despiadado y peligroso que el que habían abandonado, Yeonmi Park y su madre arriesgaron sus vidas una vez más en otro intento desesperado por escapar. Huyeron a través del desierto de Gobi, guiándose por las estrellas de la libertad en la noche helada.
Yeonmi Park narra por primera vez su asombrosa historia, de principio a fin, con valentía y dignidad, e incluso con humor. Escapar para vivir es un testimonio de la entereza del espíritu humano y una exploración de hasta dónde estamos dispuestos a llegar para ser libres.
